El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anunció este martes que el Consejo de Ministros de este viernes, que se celebrará en Barcelona, aprobará una subida del 2,25% en el salario de los funcionarios para 2019. A ese incremento, agregó el líder socialista, podría añadirse una parte variable de un 0,25% ligada a la evolución del PIB, y otro 0,25% más procedente de fondos adicionales.
Sánchez reconoció la capacidad de acuerdo y la “responsabilidad” de las organizaciones sindicales en esta materia y subrayó el compromiso del Gobierno con el fortalecimiento de la función pública. El presidente hizo el anuncio en el Senado, donde compareció a petición propia para explicar las líneas generales de la acción de su Gobierno, y también, a petición del grupo popular, para hablar de política migratoria.
La comparecencia de Sánchez fue la primera de un presidente en la Cámara alta desde hace más de diez años. El también socialista José Luis Rodríguez Zapatero fue el último presidente que acudió al Senado para rendir cuentas con una comparecencia de este tipo, y lo hizo en 2008. Para el PSOE, la presencia de Sánchez este martes demuestra su “sensibilidad” y su “compromiso con las instituciones”.
?️ @sanchezcastejon El feminismo no es una ideología de género. Es una credencial que este Gobierno luce con orgullo.
Frente al infame negacionismo, este Gobierno se va a encargar de que la voz de la mujer se tenga en cuenta en nuestras normas.#SánchezSenado pic.twitter.com/8s9urbcdqN— PSOE (@PSOE) 18 de diciembre de 2018
El socialista arrancó su discurso sumándose al minuto de silencio para lamentar la muerte de Laura Luelmo, que a falta de que lo confirme la investigación, habría sido víctima de un crimen machista. Además, durante su intervención, afirmó que el Gobierno responderá con “políticas concretas, más feminismo y más igualdad” a quienes “viven de la nostalgia de la España en blanco y negro” y propugnan una “regresión machista”, y también a quienes parecen dispuestos a elegir “involución a cambio de sillones”.
Un nuevo tiempo con tres grandes ejes
El presidente del Gobierno reivindicó los tres ejes que guían la acción de su Ejecutivo, que llegó a la Moncloa tras una “sentencia demoledora para el PP” y una moción de censura “imprescindible” para la “regeneración” y para frenar la “desafección” política. Es decir, una moción que “abrió un nuevo tiempo”. Esos tres ejes son la regeneración moral y política, la modernización de la economía y el fortalecimiento de la cohesión social.
En materia de regeneración, recordó las iniciativas del Gobierno para publicar los bienes de los altos cargos, acotar los aforamientos o modificar la Constitución para adaptar su redacción a la realidad de las personas con discapacidad. Sobre la modernización económica, destacó la apuesta decidida y el aumento de las inversiones en sectores como la agricultura, la pesca, la industria, la cultura o la ciencia y la innovación.
?️ @sanchezcastejon El viernes aprobaremos en #CMin la subida más alta del #SMI desde 1977: 900 euros.
Es una decisión que impugna las consecuencias de la devaluación salarial que ha empobrecido a los trabajadores en estos últimos años.#SánchezSenado pic.twitter.com/NfT9X71Nel— PSOE (@PSOE) 18 de diciembre de 2018
En tercer lugar, en lo referente a la cohesión social, Sánchez llamó a ganar una década tras diez años perdidos y marcados por una profunda crisis y una recuperación desigual: “Ya es hora de darle la vuelta a esa ecuación y equilibrar la balanza en beneficio de la mayoría social”, apuntó. En ese ámbito enmarcó las medidas del Gobierno para mejorar los servicios públicos, mejorar la calidad del empleo o facilitar el acceso a la vivienda.
Y, finalmente, en relación con otro reto importante como es la crisis territorial, Sánchez reivindicó la democracia, el diálogo y la ley. “Diálogo siempre, Constitución también”, apuntó el presidente, quien rechazó el discurso de las derechas que “ven en la crisis territorial la oportunidad para derruir la España autonómica y volver al centralismo predemocrático”. El socialista argumentó que el modelo autonómico ha impulsado “la cohesión social y territorial” y, por tanto, la “convivencia y la concordia”.
?️@sanchezcastejon El programa político de este Gobierno tiene continuidad y tiene como meta cerrar las heridas aún abiertas tras una década perdida.
?? Un proyecto que no se va a detener.#SánchezSenado pic.twitter.com/gX9DTlCoxe
— PSOE (@PSOE) 18 de diciembre de 2018
Todo este programa y este proyecto, dijo Sánchez, tendrá continuidad en el futuro. El socialista, agregó, es un proyecto político “que se define por aquello que propone, y no por aquello a lo que se opone”. El presidente recordó que este jueves el Congreso votará la senda de estabilidad, primer paso para la aprobación de los presupuestos de 2019, y apeló a todos los grupos para aprobar esas cuentas que supondrán el blindaje del Estado de bienestar y la conquista de nuevos derechos y libertades.
Una política migratoria a la altura de un reto complejo
En cuanto a la política migratoria, el presidente lamentó la “exageración” y el “alarmismo” de las derechas, una retórica que no sintoniza con la población española, a la que felicitó por no exteriorizar sentimientos xenófobos ni siquiera en los momentos más agudos de la crisis económica. A partir de ahí, Sánchez criticó al anterior Gobierno por desatender los flujos migratorios y expuso sus propuestas.
?"Responsabilidad y solidaridad para afrontar un desafío en el que no existen atajos, ni se necesita el ruido interesado de quienes buscan réditos políticos."#SánchezSenado pic.twitter.com/CsZpfB4q0A
— PSOE (@PSOE) 18 de diciembre de 2018
En el primero de los capítulos, el líder del Ejecutivo recordó que durante la etapa del PP se perdieron 12.000 agentes de Policía y Guardia Civil, y que en solo cuatro años, de 2013 a 2017, se registró un aumento del 300% en la inmigración irregular y del 500% en las peticiones de protección internacional. “Entiendo que algunos tengan la tentación de mostrar dureza en este debate, quizá para taponar brechas ante la emergencia de nuevos actores, pero no pueden presumir de logros palpables”, les recriminó.
Frente a la incapacidad de la anterior administración, Sánchez expuso su hoja de ruta, que pasa por “integrar la inmigración legal y ordenada que España necesita para seguir creciendo y frenar la brecha demográfica”, al tiempo que se frena la inmigración irregular y se fortalece la cooperación con los países de origen y tránsito, otra materia que abandonó al anterior Gobierno.